La banca vuelve a conceder hipotecas con criterios de burbuja: financiación del 100% a 40 años vista
A principios de 2016 se afirmaba que se iban a comercializar hipotecas más baratas y accesibles para todos los públicos y sin embargo, asistimos a un encarecimiento generalizado de los diferenciales en los créditos para compra de vivienda a tipo variable y también de los tipos fijos. Adicae, la plataforma de consumidores que más ha luchado por la supresión de las cláusulas suelo, alerta de cómo los bancos se están cubriendo para afrontar esta realidad. Que nos puede llevar a una nueva burbuja inmobiliario calificada por algunos como la 2.0.
En el año 2015 como asegura el INE, la contratación de hipotecas en nuestro país aumentó un 20%. A la vista de estos datos parece que desde el sector financiero se persigue que la actividad inmobiliaria vuelva por sus fueros pero desde las plataformas de consumidores se recuerda que no se han corregido ni resarcido los fraudes del pasado en este sector.
Adicae, una de las responsables via macrodemandas de la supresión de cláusulas suelo alerta de que las praxis bancarias de antaño se vuelven a implementar si es que en alguna ocasión dejaron de hacerlo. Así, y a sabiendas de que los tipos de interés bajos se prolongarán al menos 10 o 15 años las entidades se han lanzado a una campaña sin precedentes para modificar hipotecas con «suelo».
Junto a esto se registra un aumento de los intereses -incluso por encima del 3%- y tampoco es casual que la firma de nuevas hipotecas a tipo fijo ya represente casi el 30% del total. Por este motivo, afirmó Manuel Pardos presidente de Adicae a OKDIARIO, se recuperan malas prácticas del pasado más propias de la burbuja, como la financiación del 80% o el 100% de la tasación o la concesión de créditos a 30 o 40 años.
Mientras, la población hipotecada sigue al límite, pues de un modo u otro, se impide a los particulares beneficiarse de un momento histórico de tipos bajos e incluso de euríbor negativo. Por todo ello se está cebando una nueva burbuja inmobiliaria llamada 2.0 si es que, dicen con ironía las fuentes consultadas, algo se aprendió de la pasada.
Los descafeinados «decretos Guindos» no han resuelto el grave problema hipotecario español que requiere reformar la legislación, incluida la ley concursal que han supuesto una ligera reducción de los lanzamientos judiciales (1,1%) quizá menos traumáticos que los vividos en el pasado.
Los jóvenes españoles siguen viendo en la compra de una vivienda una forma de ahorro y seguridad para la vejez (casi el 74%) frente al 20% que preferiría vivir de alquiler. Si no pueden comprar, básicamente se debe a la precariedad y la falta de empleo según el estudio de Adicae sobre jóvenes y vivienda. Además, no se encuentran en nuestro país atractivos al alquiler pues cuesta tanto o más que pagar una hipoteca y sólo se consigue que la gente vaya de alquiler por movilidad laboral o motivos de estudio, según el informe antes mencionado.
Por todo esto, nuestros jóvenes de 30 años y más, no tienen ningún problema en permanecer en la casa de los padres (6 de cada 10) y sólo 2 de cada 10 sí se plantean emanciparse. Todo esto también tiene un impacto sobre las relaciones de pareja pues las edades de convivencia se alejan más en el tiempo. Lo cual deriva en una paternidad cada vez más tardía si es que llega.
Los pocos valientes que consiguen instalarse en una casa propia dedican la mitad de sus ingresos para pagar la vivienda cuando los expertos afirman que habría que dedicar un máximo del 30% pues si no, lo que indica es que estamos ocupando una casa que no podríamos pagar en caso de complicársenos el horizonte.
Por último, considera este colectivo que se califica como de consumidores críticos, responsables y solidarios, que la dación en pago o la ley de segunda oportunidad son medidas muy limitadas que el nuevo Ejecutivo debe ampliar para acabar de una vez con el problema de la vivienda en nuestro país y que va más allá de casos extremos como los desahucios.